Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten. (3:21)En Efesios 6:4 también existe un versÃculo paralelo para esta instrucción de Pablo: âY vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señorâ. Los deberes en la relación entre padres e hijos no existen en una sola dirección. Los padres también tienen obligaciones que deben cumplir hacia sus hijos. Pateres (padres) se refiere tanto al padre como a la madre, como es el caso en Hebreos 11:23. La exhortación de Pablo para los padres es âno exasperéis a vuestros hijosâ. Exasperar viene de erethizÅ y significa provocar, incitar, irritar o enojar. Otra manera de traducir el mandato de Pablo serÃa: âdejen de molestar a sus hijosâ. Si los padres no cumplen con esto, lo que esto produce es que los hijos se desalienten. El sentido de esta expresión es âperder el ánimo o el espÃrituâ, y encierra la idea de estar apático, malhumorado, desanimado o abatido. Los padres pueden provocar desánimo en sus hijos cuando no los disciplinan con amor ni los instruyen en el camino del Señor de manera equitativa y justa. . . .